Palabra ministrada por el Hermano Pedro Dong, transmitida por el Instituto Vida para Todos, directamente desde Bogotá en Colombia, el 18/06/2023. Este texto no ha sido revisado por el autor.

 

 

1. Estamos en Bogotá, Colombia. Hicimos un viaje desde la semana pasada, visitando las localidades principales de este país. Hemos visto la bendición del Señor en este país en los últimos dos años. Todo comenzó cuando los lideres empezaron a seguir con sencillez la palabra profética. El Señor ya ha bendecido con un CEPEV y Expolibro. En poco tiempo, se comenzará a manejar una unidad de PAC, aquí en Bogotá. Todo esto es para que el Señor pueda avanzar más rápido en esta región de la tierra. Nuestra área de influencia es para esta región de América del Sur. Queremos avanzar en la región del Caribe y en los demás países. También, con la cooperación de todos los países, conseguiremos predicar el evangelio del reino a todas las naciones y así el fin vendrá. Esa es nuestra comisión: predicar el evangelio del reino, cooperar con el Señor en el tejido de amor, para que Dios tenga una habitación en el espíritu y Él tenga un día de Así llegaremos al séptimo día, el día de descanso, que es el milenio. Y nosotros queremos reinar con Cristo. 

2. Todos los cristianos necesitan tener en mente que la obra de Dios se hace por Su palabra. Dios no quiere hacer una gran obra religiosa. Él quiere edificar Su Iglesia, que es el Cuerpo de Cristo, un organismo vivo. Todo depende del hablar de Dios que dispensa vida y resulta en la edificación. La Voluntad de Dios es hecha por el encabezamiento de Cristo. Cuando Dios habla Su obra es hecha. Por eso, en el Antiguo Testamento, Dios habla por los profetas, pero desde que Cristo vino a la tierra, en el nuevo pacto, nos habla por el Hijo. Él continúa hablando por el Hijo. En el inicio del Nuevo Testamento, comenzó la era del Hijo. Después que el Hijo partió, dejó 12 apóstoles para hablar por Él. El apóstol Pedro entonces fue escogido, después Pablo fue ese canal. Dios escoge a los profetas para hacer Su obra. Por medio de Pablo, Dios llevó el evangelio a los gentiles y el evangelio llego a occidente. Después de Pablo, Dios levantó a Juan. Todos ellos fueron levantados por el Hijo. Son canales para hablar al Pueblo de Dios. Hoy, no es diferente, El continúa hablando para hacer Su Voluntad.

Éxodo 19:4-6

3. En Éxodo 19, cuando Dios, sacó Su Pueblo de Egipto, llegando al monte Sinaí, El abrió Su corazón sobre como haría Su obra. Fue muy difícil sacar dos millones de personas de Egipto y transportarlos por el desierto, no había la estructura de hoy. Pero el Señor los llevó en alas de águila. El trajo al Pueblo hacia a Él. Todas las naciones en ese tiempo adoraban ídolos, eran paganos y nadie adoraba al Dios verdadero. La idolatría existe desde la época de Nimrod. El Pueblo tenía un concepto, de que los dioses falsos eran castigadores. Nimrod, influenciado por Satanás, hizo que la humanidad le tuviera odio a Él declaró que el hombre no necesitaba de Dios. Entonces, otra interpretación, es que la naturaleza era controlada por los dioses falsos. Ellos ofrecían sacrificios a los dioses, para que ellos no los castigaran. La relación entre los seres humanos y los dioses era de miedo. Pero en Éxodo 19, Dios muestra que Él no era así. Él sacó al pueblo de Egipto para que fuese íntimo de Él. Dios es un Dios de amor, Él quiere ser íntimo de Su pueblo. Dios no te quiere castigar. Él quiere ser cercano a ti. ¿Qué hacer para ser cercano a Dios? El Pueblo que salió de Egipto no lo conocía. Conocemos a Dios oyendo Su voz. El Pueblo de Dios solo necesita hacer una cosa: dar atención a la voz y a la palabra del Señor. La voz del Señor nos lleva a ser un pueblo íntimo de Dios. 

4. Dios no exige que seamos buenos, que tengamos una vida correcta. Solamente, tenemos que oír la palabra de Dios con atención. Deje que la palabra de Dios haga la obra. Si hacemos esto, nosotros seremos Su especial tesoro, reino de sacerdotes y nación santa. El sencillo hablar del Señor puede hacer grandes cosas. El hablar de Dios hace de nosotros Su especial tesoro, hace que seamos un reino de sacerdotes. No sacerdotes de reinos paganos. Dios por medio de Su hablar, quiere hacernos una nación santa. Todo es hecho por el hablar de Dios. Pero hay un problema: El hombre piensa que con oír una vez la voz de Dios ya es suficiente, El hombre no logra retener con solo oír.

Éxodo 19:8; Deuteronomio 6:1-8

5. El hombre tiene buena intención, pero no se conoce así mismo. Usted escucha, pero no sabe lo que oyó. Quién oye, olvida. Lo que usted oye hoy, mañana lo olvida. Por eso Dios le da importancia a la palabra escrita. Dios siempre da mucha importancia al libro. Porque Él sabe que el hombre piensa que oír una vez ya es suficiente ¡Escuchar y practicar! Quién oye se justifica, pero quién practica aprende. Quién oye, olvida, y quién no práctica se justifica, pero quién practica aprende. Dios es el único Señor. Por eso en la Iglesia del Señor no hay varias voces. Sólo hay una dirección. No hay término medio: El Señor exige que lo amemos de todo nuestro Pero no tenemos esa capacidad. El amor por el Señor al principio es grande, pero con el pasar de los días, el amor se enfría. 

6. ¿Cómo podemos ser un pueblo que ama al Señor? ¿Cómo podemos ser un pueblo que hace Su voluntad? Las palabras que el Señor ha ordenado deben estar en nuestro corazón.¿Cómo podemos hacer que esas palabras estén en nuestro corazón? No es suficiente oír apenas una vez. Necesitamos de la palabra escrita. La palabra inculcar, es grabar e imprimir esas palabras en nuestro corazón. Grabar por repetir varias veces. ¿Como repetir si no tiene las palabras por escrito? Para inculcar, la palabra debe estar cerca de nuestras manos. ¿Cómo inculcar la palabra? Al dormir, al despertar, hacer inmersión. Yendo a trabajar: inmersión. En el desayuno: inmersión. Vemos la importancia de inculcar la palabra del Señor en nuestro corazón. 

Efesios 5:18; Colosense 3:16

7. Debemos llenarnos del espíritu. ¿Cómo nos llenamos del espíritu? Hablando la palabra del Señor ¿Cómo la palabra de Cristo va a morar en usted? Por repetirla, a lo que llamamos inmersión en la palabra. De esa forma la palabra queda grabada en nuestro corazón. La palabra morando en nuestro corazón, espontáneamente hará la obra de Dios en nosotros. Así, amaremos al Señor, con el primer amor y haremos Su Voluntad, predicando el evangelio del reino en las calles. Todo depende de que inculquemos la palabra en nuestro corazón. Por eso Dios da atención a los libros.

Génesis 5:1; Éxodo 17:14; 24:7.

8. Dios registro la genealogía de Adán en un ¿Por qué escribir un libro? Para memorizar. Dios conoce al hombre. Dio un libro para que el hombre recuerde. Si Dios no mandara a registrar en el libro, el pueblo no podría leer ¿Pero cuál fue la actitud del pueblo? Ellos dijeron: Todo lo que Dios hable, lo haremos. El hombre no tiene capacidad. La palabra nos da capacidad.¿Qué es lo que usted tiene que hacer? Inculcar la palabra. Usted necesita hacer inmersión, repetir esa palabra. La palabra necesita estar grabada en su corazón. Esa palabra lo capacitará a practicar.

Éxodo 32:33; Números 21:14; Deuteronomio 17:18-20; 28:58-61

9. El libro fue escrito por Dios. Aquí dice que Dios escribió. Hasta las batallas y guerras del Señor son registradas en un libro. El hombre olvida rápidamente lo que el Señor hace. El hombre olvida las victorias del Señor. Entonces el Señor dice: regístrenlo en el Cuando un rey comienza a reinar, lo primero es: Hacer una copia de la ley en un libro. Necesitamos leer todos los días. El rey que hace inmersión en la palabra no es arrogante, sino humilde. La palabra nos hace humildes. Por nosotros mismo no podemos cumplir, pero la palabra da la capacidad. La práctica de la inmersión en la palabra nos ayuda a mantenernos en el lugar. Sin la inmersión, comenzamos a enorgullecernos. Si usted hace inmersión en la palabra, el Señor lo mantendrá siempre humilde. Cuando usted hace inmersión, el Señor le dará dirección. El Señor bendecirá el liderazgo. Usted no liderará por el hombre natural, sino por la palabra del Señor.

 Josué 1:8

10. Josué tenía ante sí un gran desafío. Dios no permitió a Moisés entrar en la buena tierra de Canaán. Josué era un hombre joven y tenía una gran tarea. No era por la capacidad de Josué. Necesitamos meditar de día y de noche. La palabra te hará exitoso. La palabra profética hace la obra de Dios. Las iglesias en Colombia descubrieron esto. Debemos meditar todos los días. El Señor la ha hecho prosperar en estos dos últimos años. No dejen de hacer inmersión en la No se desvíen de ese camino. Sigan inculcando la palabra. El Señor habló a través de Moisés a Josué. El Señor ordenó a Josué que no dejara de leer el Libro de la Ley, que meditara en él día y noche, que tuviera cuidado de hacer todo lo que está escrito en él; entonces su camino prosperaría y tendría éxito.

2 Crónicas 17:7-10

11. Los sacerdotes enseñaban al pueblo en la ciudad de Judá. Lo hacían teniendo consigo el libro de la Ley. No es fiable transmitir la palabra sólo oralmente. No hay que fiarse de impartirla sólo Hay que tener el libro, algo escrito. Si somos fieles a la palabra y hacemos inmersión en ella, el enemigo nos temerá y nada nos detendrá. En el tercer año de su reinado, el rey Josafat envió a sus príncipes con los levitas y sacerdotes a enseñar en Judá, con el Libro de la Ley del Señor, recorrieron todas las ciudades de Judá y enseñaron al pueblo. El terror se apoderó de los reinos alrededor de Judá y no hicieron la guerra contra Josafat.

Nehemías 8:5-12

12. Esta es nuestra responsabilidad. Además de tener la Biblia en la mano, para leerla con exactitud y precisión, tenemos la palabra profética que la explica, para que uno entienda lo que lee. El pueblo comprendió el corazón de Dios. Lloraron porque vivían de manera diferente a lo que Dios decía. El pueblo celebró y se alegró mucho porque había comprendido las palabras que se le habían explicado. Por eso hacemos colportaje. Hoy, todos los cristianos tienen el libro en la mano, pero no lo entienden. Gracias a Dios tenemos la palabra impresa en libros, y esa palabra lleva el evangelio del Nuestra responsabilidad es predicar el evangelio por todo el mundo. 

Mateo 1:1; Marcos 12:16; Lucas 3:4; 4:17; 20:42; Hebreos 1:1-2

13. Vea la importancia de los libros. Sigamos la línea del último mensaje, respecto a los Fueron los primeros colportores. Los valdenses tienen continuidad hoy con nuestros colportores. Hoy muchos entienden la Biblia, recibiendo los libros que contienen el evangelio del reino.

Apocalipsis 1:11; Apocalipsis 22:7; 10; 18-20

14. Juan escribió lo que vio en un libro y lo envió a las siete iglesias. Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro, y ellas no deben ser selladas, porque el tiempo está cerca; nada se añadirá ni se quitará a las palabras del libro de esta profecía.

15. Hemos visto la importancia del libro, pero ¿cómo habrá libro sin papel? Un poco de historia: la caída de En el año 1453, tras un asedio que duró 53 días, la capital oriental de la cristiandad cayó en manos de los turcos. El sultán Mohamed II trasladó su gobierno a Constantinopla, que pasó a llamarse Estambul. Muchos sabios griegos se trasladaron a Italia, de allí partieron a muchos otros países de Europa, lograron salvar varios libros y tesoros de las ciencias de Constantinopla, esto fomentó enormemente el estudio de la lengua, literatura y ciencias griegas, como preparación para la llamada reforma protestante.

16. La fabricación del papel comenzó con el descubrimiento de la fabricación de un papel blanco y fino a partir de trapos de lino. Tras una serie de mejoras, se produjo un papel de mejor Sin la producción de papel, la invención de la imprenta no habría tenido sentido. Sin papel,¿Cómo podríamos tener el libro? Pero Dios es soberano en todas las cosas. En el momento oportuno Dios permitió la invención del papel.

17. Sobre la invención de la Hemos hablado de la importancia del libro para el registro de la Palabra de Dios, sin embargo, su reproducción dependía de escribas, profesionales que copiaban los manuscritos, por lo tanto, era de edición muy limitada. En el momento oportuno de la historia humana, Dios permitió la invención de las artes gráficas, para dar un impulso definitivo a la siembra masiva de la Palabra de Dios, con miras al cumplimiento de Su propósito.

18. El primer libro completo impreso por Gutenberg, inventor de la imprenta, fue la Biblia. Era una versión de la Vulgata latina, que constaba de 641 páginas. Esto demuestra el gran interés de Dios detrás de este invento. Gutenberg empleó casi diez años en perfeccionar su invento, contó con la participación del inversionista Fust y de su yerno, Schoffer, talló los caracteres en una matriz y moldeó las letras o moldes de letras. Con el esfuerzo de estos tres hombres, imprimieron, hacia 1450, una Biblia en latín. Y la segunda edición se produjo hacia 1462.

19. Debido al costo elevado de inversión y producción, los primeros ejemplares impresos fueron adquiridos por reyes, nobles o sacerdotes. Fust fue denunciado como practicante de las artes mágicas e incluso fue Pronto se desveló el secreto y los empresarios llevaron el arte de imprimir libros por toda Europa. En 1474 se introdujo en Inglaterra y en 1508 apareció en Escocia.

20. Antes de la invención de la imprenta, los manuscritos eran muy raros y caros, sólo podían ser adquiridos por reyes y nobles. Otros que podían permitirse adquirirlos eran los colegios y las comunidades eclesiásticas. Un ejemplar de la Biblia tendría el coste del trabajo de un copista experimentado durante unos 10 meses. Con la imprenta, su coste bajó rápidamente, haciendo la Biblia accesible al público en general, sacando al pueblo de la completa oscuridad, ignorancia y superstición creadas por el clero.

21. Se inició la traducción de la preciosa Palabra de Dios a varios idiomas. Una traducción italiana apareció hacia el año 1474; la traducción al idioma de Bohemia en 1475; la traducción holandesa en 1477, el mismo año que la traducción La traducción española apareció en 1478. La luz de la Palabra comenzó a iluminar al pueblo de Dios. 

Mateo 13:15-19

22. Gracias a Dios, hoy en día todo el mundo tiene acceso a un ejemplar de la Biblia, que puede adquirirse a un precio muy asequible. Sin embargo, sin la revelación, el pueblo no comprende. Todo el que oye la Palabra del reino y no la entiende, viene el maligno y le arrebata lo que se ha sembrado en su corazón. Si tenemos la revelación de la Palabra: las personas verán con sus ojos, oirán con sus oídos, entenderán con su corazón, se convertirán y serán sanadas.

23. Hoy el Señor está restaurando Su iglesia a través de la revelación de la Palabra, y nosotros tenemos la responsabilidad de sembrar esa palabra del reino en los corazones de las personas a través de los libros. La iglesia en Filadelfia tiene la palabra y tiene la revelación de la palabra, también tiene la responsabilidad de llevar la palabra del reino a través de los libros.

Salmos 119:130; Proverbios 29:18 KJA

24. Necesitamos tener la revelación de la palabra. La revelación de la palabra aclara y da La revelación de la Palabra proviene de la profecía, por lo tanto es la palabra profética. Un pueblo que no acepta la revelación del Señor es un pueblo sin orden.

Hechos 8:30-31

25. El eunuco etíope había estado leyendo al profeta Isaías, cuando Felipe se le acercó y le preguntó si entendía lo que leía, él respondió: ¿Cómo voy a entender si no me lo explican? Felipe estaba lleno de la palabra, había hecho inmersión en la palabra. Y el resultado fue que el eunuco creyó en Jesús y se bautizó.

26. Con la imprenta, la Biblia se hizo accesible al público: el clero empezó a oponerse e intentó quemar las Biblias y también quemar la imprenta. Los dueños de la imprenta fueron quemados vivos. Querían mantener al pueblo en la esclavitud, la ignorancia y la superstición. Satanás no quiere que la revelación llegue a manos del pueblo.

27. Algo que se dice: No se debe vender los libros. No se debe vender la palabra de Dios. Debemos aclarar que toda impresión tiene un costo. La Biblia impresa tenía un costo, pero miren el beneficio. Hoy, tenemos los costos de editar e imprimir libros. Minimizamos esos costos, para que todos tengan la revelación de la palabra. Pero, no estamos vendiendo la revelación de la Recibimos la revelación gratuitamente y la impartimos gratuitamente.

28. Satanás quiere impedir que los libros lleguen a las manos de las personas. Sabemos que hemos recibido todo esto del Señor y todo ha venido de la mano del Señor. El Señor librará a muchos de las tinieblas y ellos se unirán a nosotros para terminar esta era. No tememos los ataques de los Los libros serán distribuidos y las semillas serán sembradas por todo el mundo, entonces vendrá el fin. Un día no habrá más colportores, porque vendrá la gran tribulación. Todos los que han hecho este trabajo habrán sido arrebatados. Pero habremos dejado los libros en manos de las personas. Aquí en Colombia se habrán sembrado millones de libros.

¡No vamos a dejar de sembrar libros!