1.Una característica contundente de un siervo del Señor es amar Su venida. Los que verdaderamente aman la venida del Señor luchan para que Su voluntad sea hecha lo más rápido posible, no pierden el tiempo queriendo hacer su propia obra o tratando de ganar popularidad y seguidores, retrasando así la obra del Señor (2 Timoteo 4:6-8).
2.Aquel que ama la venida del Señor no da lugar a su propia obra, a su propia voluntad, ya que sólo le interesa la voluntad del Señor y que la iglesia sea edificada, que el evangelio del reino sea predicado y que el Señor regrese lo antes posible (Mateo 16:24-26; 2 Pedro 3:10-12).
3.¡El hijo varón es quien lucha por el reino, y nosotros somos parte de él! ¡Quien predica el evangelio del reino es gobernado por la Palabra, está luchando por el reino de Dios y ciertamente está incluido en esta parte fuerte de la iglesia! (Apocalipsis 12:1-6).
4.Que el Señor guarde nuestro corazón y nuestra conducta hasta aquel día, para ser aprobados y reinar con Él. ¿Este también es su deseo? (Lucas 21:36) (Alimento Diario, Libro 4, Semana 1, Sábado, pág. 17).
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