1. La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales (Colosenses 3:16)
- Una vez que la Palabra de Cristo mora en nosotros, vivimos bajo su autoridad y gobierno (Colosenses 3:17). Y como consecuencia, damos por Él, gracias a Dios en todo. En la práctica de la inmersión somos llevados a hacer todoen el nombre del Señor y damos gracias a Dios porque todo funciona.
- Hacer morar la palabra es hacer morar a Cristo. ¿Y cómo hago que Cristo habite en mí? ¡Yendo a la palabra! ¿Cómo podemos ser llenos del Espíritu y hacer que la Palabra de Cristo habite en nosotros con toda su riqueza? Haciendo inmersión, es decir, sumergiéndose profundamente en la Palabra, en compañía de los hermanos, ejercitando el espíritu, de esta manera la palabra puede entrar en nuestra mente.
- El producto final es el amor (Efesios 3:17-19). Esta es la vida del Al servir y trabajar junto con los hermanos entendemos el amor. Necesitamos pedir ayuda a los hermanos. Cuando un miembro sufre, el cuerpo sufre (1 Corintios 12:12, 25- 26). Juntos, comprenderemos la dimensión de Cristo y seremos llevados por la plenitud de Dios.