INMERSIÓN DIARIA Miércoles | M02. Los Factores de la Decadencia de la Iglesia

  1. Hoy somos como canales para transmitir la Palabra de No solo información acerca de Dios, sino que transmitimos a Dios mismo con todo Su poder, capacitando al hombre para cumplir la Palabra. ¿Por qué Jesús tenía poder cuando vivía en la tierra? Porque la Palabra moraba en Él. (Juan 1:14)
  2. Los dos discípulos en el camino a Emaús testificaron que sus corazones ardían cuando Jesús les hablaba. La Palabra de Dios arde, arde y prende fuego a nuestros corazones. ¡No es mera información o conocimiento bíblico, sino Dios mismo! Gracias al Señor, la Palabra en la que nos sumergimos está encendiendo nuestros corazones. (Lucas 24:13-35)
  3. A Pablo se le confió la responsabilidad de servir como canal para el fluir de la Palabra de Dios como gracia. ¡Esta es la elección de Dios! Pablo no aplicó y no eligió ser ese canal. Es Dios quien elige. Y el elegido por Dios conoce su Pablo dijo varias veces que él era el más pequeño de los apóstoles. Sabía que no era digno de ser un dispensador de la gracia de Dios. (Gálatas 2:7-9, Efesios 3:2-7)
  4. Es difícil recibir la palabra de un hombre sin dudar de que es de hecho la palabra de Dios, porque siempre viene la idea de que el hombre es falible. Pero Dios usa a los hombres. Los tesalonicenses escucharon la palabra de Pablo, pero no la tomaron como palabras de hombres, sino de Dios (1 Tesalonicenses 2:13). Cuando aceptamos la palabra del apóstol y creemos en ella como la palabra de Dios, esta obra eficazmente en nosotros y hace la obra de Dios. Eso es lo que hemos estado experimentando durante los últimos años. (Alimento diario, Libro 2, Semana 1, miércoles).

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