INMERSIÓN DIARIA Viernes | M.09 El Problema del Gobierno de la Iglesia

Cuanto más oímos la palabra, más dejamos de ser un pueblo común en el mundo para ser propiedad exclusiva de Dios. ¿Cómo podemos dejar de servir a los ídolos y ser un reino de sacerdotes que sirven a Dios? Sólo hay una manera: por la obediencia a la Palabra. ¡Por eso Dios nos dio la inmersión! Eso cambia nuestra cultura (Éxodo 19:5- 6).
La palabra viva de Dios está siendo inculcada en nosotros y nuestra naturaleza está siendo transformada. Éramos paganos, pero ahora somos una nación santa. Así que, valore la palabra. ¡Valore la inmersión! Inculque la palabra en su corazón, para que more abundantemente en él. (Deuteronomio 6:6-7; Colosenses 3:16).
Hoy vivimos esta realidad. ¿Cómo gobierna Dios la Iglesia? Por Su boca, Su palabra. Cuando Dios habla a través de Su canal, la iglesia tiene dirección y cumple con su deber. ¿Cómo gobierna Dios a la iglesia? Por medio de la palabra que sale de Su boca, como una orden (Números 9:23, 2 Pedro 1:19).
“Estamos encabezados por Cristo, que es la plenitud del Padre, el único que puede conducirnos a toda la realidad de Dios. Ya no seguimos la voluntad del hombre. Hoy somos un pueblo que se somete a la dirección de Dios, guardando Su palabra”. (Alimento Diario, Libro 4, Semana 1, viernes, pág. 20).