Palabra ministrada por el Hermano Pedro Dong, transmitida por el Instituto Vida para Todos directamente desde La Estancia Árbol de la Vida – Sumaré, Brasil, el 24/02/2023. Texto no revisado por el autor.

 

 

Colosenses 2:1-7

1. Pablo ha estado manteniendo una gran lucha por los Colosenses, Laodicenses y toda Asia menor, que no lo vieron cara a cara. Lo que estamos haciendo en la tierra, al principio nos da gran alegría, como esta reunión, pues estamos en la esfera celestial, por otro lado, vivimos aquí donde hay una usurpación del El enemigo ha usurpado la tierra para sí. Por un lado, lo que hacemos es para la edificación de la iglesia, rescatar, sanar y edificar a las personas. Por otro lado, estamos en una gran lucha. ¿Usted se da cuenta de que estamos en guerra? La sala de comunión de los cooperadores se llama Sala de Guerra. Desde allí recibimos la orden y todos los oficiales del Señor cumplen las órdenes.

2. Colosas y Laodicea son dos iglesias que fueron levantadas por Epafras, un obrero perfeccionado por Pablo en Éfeso. Él pasó dos años en la escuela de Tirano en una propiedad alquilada, perfeccionando cooperadores para alcanzar a las iglesias de Asia Así, las iglesias de Colosas, Laodicea e Hierápolis fueron levantadas por Epafras. Aunque Pablo no conocía estas iglesias personalmente, Pablo era consciente de su responsabilidad de anunciar a Cristo para presentar a cada hombre perfecto en Cristo.

Colosenses 1:28-29

3. Pablo no hizo la obra de una manera masiva. Un orador, que predica la palabra, que quiere alcanzar popularidad, solo habla palabras bonitas. Sin embargo, Pablo era fiel al Señor. No es fácil advertir. Pablo, liberado de la primera prisión y antes de la segunda, envió a Timoteo a Éfeso para amonestar a algunas personas a no enseñar palabras que no fueran las enseñadas por él. Pablo hizo esto por amor que procede de un corazón puro, de una buena conciencia y fe sin Sólo un verdadero siervo de Dios dice la verdad y advierte a los hombres.

4. Salimos a las calles para predicar el evangelio y dejamos libros que hablan del evangelio del reino, una palabra dura, como alimento sólido, para que ellos se Nuestro objetivo es -> llevar a estas personas a ser sanadas en la iglesia, y ponerlas en combate, para servir al Señor predicando el evangelio y cuidando de más personas. El objetivo de todo esto es que estas personas reciban el río de la gracia, llenen todos los vacíos de su ser, hagan con nosotros la inmersión en la palabra, abran la puerta de la mente para que Dios penetre en el corazón y lleve a Cristo a cada parte de su ser. Queremos generar una iglesia en Filadelfia que no sea solo nuestra, nuestra responsabilidad es llevar a todos perfectos a Cristo.

5. Es por lo que me fatigo, para llevar a cada hombre maduro a Cristo, y no me esfuerzo con mi fuerza natural, sino de acuerdo con Su eficacia que opera en mí. Tenemos cada vez más hermanos aprendiendo a trabajar en el reposo de Dios. Cuando el hermano Dong tenía mala salud en 2016, yo temía recibir la responsabilidad de la obra y peleé con el Señor. Luego me hizo ver Éxodo 33, Moisés después de 40 días en el Monte Sinaí, mientras Dios le dio los 10 mandamientos, el pueblo, debajo del monte, ya había prevaricado y ofendido al Señor con idolatría a un becerro de oro.

6. Cuando Moisés vio esa situación, rompió ambas tablas y le dijo al pueblo: “Quien es del Señor, venga a mi lado, y saque su espada, mate a cada uno de sus hermanos, vecinos y parientes”. La tribu de Leví estaba a su lado y se santificó para el Moisés vio la indignación de Dios contra el pueblo y le recordó al Señor la promesa hecha a Abraham. El Señor decidió no ir más junto con el pueblo, sino enviar un ángel a la tierra de Canaán. Moisés se desesperó y dijo: “Señor, si Tú no vas, no me hagas salir de este lugar”. En otras palabras, si el Señor no va, yo tampoco lo haré. La promesa de Dios a Moisés, la acepté para mí: “Mi presencia irá contigo y te daré descanso”. 

7. Imagínense, hermanos, esta pesada responsabilidad de dirigir a un pueblo, los problemas que surgirán, las presiones, los sufrimientos. El secreto es tener la presencia del Señor y aprender a trabajar en el descanso del Señor. Cuando una situación difícil viene a mí, no trato de resolverla, me vuelvo al Señor, esta lucha no es mía, es Tuya. Todos los problemas que he enfrentado, el Señor ha estado frente a mí, la presencia del Señor hace toda la diferencia. Aprendamos a trabajar en el descanso del Señor.

Colosenses 1:4-6; Hebreos 1:3; 11:1; Romanos 10:17;    Efesios 1:19;22; 1 Corintios 2:5; Colosenses 2:12; 1 Pedro 1:5

8. La fe, el amor y la esperanza èson las estructuras de nuestra vida cristiana. La fe está con Dios y Cristo Jesús nos da acceso a Dios que está en la dimensión de la eternidad, que no es de esta dimensión tridimensional, cartesiana. La fe es como un portal, una ventana, que te transporta a donde está Dios, donde usted tiene acceso a la sustancia de Dios, a la realidad de las cosas que no se ven.

9. La fe viene al oír la palabra de Cristo, siempre está relacionada con lo que Dios habla y no es una habilidad del hombre. ¡Al confesar a Jesús como Señor, la persona es salva! ¡Es por la palabra! Predicamos la palabra de fe y la fe desencadena el poder de Dios. Este poder resucitó a Cristo Jesús de entre los muertos y lo hizo sentarse a la diestra de Dios. Este poder hará que la iglesia haga esta obra de encabezar todas las cosas en Cristo.

10. Dios tiene esta supereminente grandeza de Su poder. La obra de Dios se lleva a cabo por la fuerza, que viene por el poder, este poder opera y ejecuta la obra. ¡La fe acciona el poder en nosotros! El motor del carro tiene poder, cuando usted gira la llave, él empieza a funcionar. ¡En su espíritu está el poder de Dios! Cuando crees en la palabra profética, usted engrana primera, acelera y suelta el embrague! ¡Entonces el auto sale del lugar y hace un trabajo! ¡Usted predica el evangelio, gana una persona, cuida de una persona!

1Tesalonicenses 1:3; 2 Corintios 3:4-6

11. Cuando usted usa la fe en la palabra profética genera una fuerza para operar y realizar un Es en la operatividad de nuestra fe que realizamos la obra. ¿Cómo vamos a hacer el trabajo usted y yo? ¡Fe en la palabra! ¡Inmersión en la palabra! La obra de Dios no se lleva a cabo por la capacidad humana, sino por el poder de Dios a través de la fe. Pablo un día nos dirá que no fue nada a través de él, sino de Dios, porque ni siquiera fue capaz de pensar en nada y mucho menos planear la obra de Dios. Ya no estamos en el viejo pacto, el cual depende de quién tenga la capacidad de cumplir la ley.

Zacarias 4:6

12. En el contexto de Zacarías 4, en el que todo el pueblo de Dios fue tomado cautivo por los Asirios y por Babilonia, pocos regresaron para edificar el templo, la gran mayoría permaneció en Esta es la misma situación de hoy, Dios tiene muchos hijos, pero están dispersos en Siria y Babilonia, Él necesita llamar a un pueblo para regresar a Jerusalén. Los que llegan a Jerusalén son los menos capaces. ¿Qué podemos hacer para poner fin a esta era? Hoy el Señor nos habla, como profetizó Zacarías: Sea valiente, no por fuerza o por su poder, sino por mi Espíritu. Yo mismo llevaré a cabo esta obra, el templo será reedificado, Dios tendrá un lugar de morada en el espíritu. La fe es la que tiene que operacionalizar. Por eso digo que nuestros jóvenes son el núcleo energético de la obra, para llevar a cabo las operaciones de Dios.

Colosenses 1:5; 1:27; Romanos 8:18-23; Apocalipsis 20:4-6

13. El tercer elemento es la esperanza. La esperanza de la segunda venida de Cristo es nuestra esperanza de Cuando Cristo venga seremos glorificados y ocurrirá la redención de nuestros cuerpos. Y los vencedores reinarán con Cristo durante mil años. La esperanza produce perseverancia y paciencia para seguir viviendo y luchando por el Reino, y vivir para la edificación de la iglesia y rescatar a más personas. La fe en la palabra es para hacer la obra de Dios, la esperanza es para darnos combustible, perseverancia, para no rendirnos. La esperanza nos mantiene firmes para luchar por el reino del Señor, queda poco, ha llegado la aurora, Él vendrá y nos galardonará.

1 Juan 4:8-12

14. Pero todo esto es para el amor. Cuando el Señor regrese, la fe ya no será necesaria, porque ya estaremos en la dimensión de Dios. La esperanza, después del regreso del Señor, ya no será más necesaria. Pero el amor -> es el resultado y el producto final de la vida de la iglesia. En este tejido de amor, el Señor nos está entrelazando con Dios y los El amor es para todos los santos. La mayor demostración de amor es que Dios ha dado a Su propio hijo como propiciación de nuestros pecados. No tenemos esta capacidad de amar si Dios no nos suple. ¡La esencia de Dios es el amor! La muerte de Cristo ha engendrado la iglesia, para que hoy podamos vivir para Él.

15. Dios es invisible, pero si nos amamos unos a otros, Él aparece entre nosotros. El mundo no ve a Dios, cuando comenzamos a vivir la vida de la iglesia a través de la fe y la esperanza, por el río de la gracia y generamos amor, amándonos unos a otros, algo se está tejiendo en nosotros. Mientras somos tejidos, Dios permanece en nosotros. ¿Cómo podemos entrelazarnos sin Dios, si el amor es Dios? Solo puedo entrelazarme con otros en amor y Dios es quien proporciona el Cuando nos amamos unos a otros, Dios es visto. En esto el amor de Dios es perfeccionado en nosotros.

1 Corintios 13:3;8-13

16. Nuestra vida cristiana tiene que producir el amor. La palabra profética algún día desaparecerá. Hoy es tan importante que nos ilumina como una antorcha, nos alimenta, nos da dirección y hace que la obra de Dios avance. Cuando llegue aquel día, incluso la palabra profética ya no será necesaria, porque Dios ya ha producido el amor. La palabra de fe, la palabra profética nos está llevando a la realidad de Dios, aún no hemos alcanzado lo que es perfecto, pero llegaremos allí. Todo esto es para producir lo perfecto, y lo perfecto es el amor. Hoy en día todavía vivimos las cosas en parte, porque no llegamos a lo que es perfecto. Estamos en dirección a lo que es perfecto, la realidad de Dios nos está llenando hasta la plenitud de Dios, que es perfecto. Vemos lo que es más importante y ya no tendremos velo, veremos cara a cara.

17. Hoy estamos aquí en la tierra para la edificación de la iglesia, el cuerpo de Cristo. Vamos a las calles para traer y rescatar a más personas para completar el número de aquellos que necesitan ser salvados. En este proceso, todos somos abastecidos por la palabra profética y la inmersión, abriendo nuestras mentes y transformando nuestra alma. Cuando Dios invade nuestras almas con Su realidad del río de la gracia, el amor mismo, la esencia de Dios nos está inundando.

Colosenses 2:2-4

18. La palabra “unido“ en griego es “sunbibazo” en griego. Significa “unir, conectar, juntar, agregar en afecto”. La palabra coalescencia tiene un significado similar: “juntar intensamente, unir con fuerza, aglutinar”. O incluso “juntar las partes dispersas, convertirlas en una sola cosa”. De esta manera sucede con los hilos de una tejido que están dispersos y sueltos y necesitan ser unidos con fuerza. Los hilos verticales no pueden unirse con fuerza, ellos necesitan los hilos transversales y deben estar entrelazados. Los hilos estaban sueltos y una vez que fueron tejidos con los hilos transversales, ahora si están firmes, compactos y Esta es la obra de Dios.

19. Cristo es la lanzadera, que entrelaza los hilos transversales. Los hilos del algodón egipcio son tan finos (los tejidos tienen más de 1000 hilos por pulgada cuadrada) que ya no se puede ver el vacío en ellos. Así que depende de nosotros, de tanto Cristo imprimir a Dios en nosotros, no habrá más vacío, estos tejidos vienen a brillar con el resplandor del sol. Dios está tejiendo eso en usted.

Efesios 4:12;16

20. La edificación de la iglesia es este tejido de amor para que Dios habite. Los hombres que Dios ha dado a la iglesia son para perfeccionarnos, para la edificación del cuerpo de Cristo. Las palabras “concertado” y “unido” en Efesios 4:16 son la misma palabra para coalescencia, Dios nos está enseñando cómo tejer este tejido de amor, edificándonos unos con otros. Cada uno tiene su función, para que este tejido quede bien compactado.

Efesios 3:16-20; Colosenses 2:2

21. El espíritu es la parte principal del hombre Aunque el espíritu humano está reconectado con Dios, después de nuestra salvación y regeneración, todavía necesita ser fortalecido por el Espíritu de Dios, para eso debemos ejercitarlo. Una forma de hacerlo es con la inmersión en la palabra profética, así el espíritu comienza a influenciar al alma, la mente comienza a renovarse, de ese modo Cristo comienza a habitar en su corazón, llenándolo con la realidad de Dios, la gracia, la verdad, la justicia, la santidad y la gloria de Dios. Su alma que estaba tan desconectada de Dios comienza a echar raíces y a estar cimentada en el amor. 

22. Estando cimentado en el amor, usted llegará a comprender con todos los santos la anchura, longitud y altura de La mente no alcanza estas cosas, porque el amor de Cristo excede todo entendimiento, pero el espíritu lo alcanza y lleva al alma a tener algo de esa percepción. ¡De esta manera, seremos llenos hasta la plenitud de Dios! ¡Cuando el Señor regrese usted verá esto! Cristo está haciendo esta obra en nosotros. Con hilos de altísima calidad, ¡mejor que el hilo egipcio!

23. ¿Qué son razonamientos falaces? Es un discurso ilusorio para engañar. Lo que Dios tiene es muy superior a la filosofía griega mezclada con la cultura de los gentiles y el judaísmo presentada a los ¡La palabra profética es una locura para los hombres del mundo! Predicamos a Cristo crucificado. No entre en la sabiduría de este mundo, no entre en la búsqueda de señales del judaísmo. ¡Cristo es el centro de la obra de Dios! Él llevará a cabo esta maravillosa obra.

1 Corintios 1:21-28

24. Cuando Dios llamó para el banquete de Su hijo, todos tuvieron excusas, los mejores rechazaron la invitación. Dios entonces mandó a buscar en las encrucijadas a los cojos, los defectuosos, los lisiados, los ciegos, y nosotros estamos aquí. El rey Saúl había sido ungido, pero él se equivocó al tratar de ayudar a Dios, al no esperar a que llegara el profeta Samuel y haciendo él mismo el servicio como sacerdote. Es mejor obedecer a Dios que hacer lo que usted cree que es necesario. El pecado de desobediencia y obstinación es mucho peor.

25. David sirvió a Saúl, que quería quitarle la vida, así que tuvo que Él buscó a un sacerdote diciendo que los que estaban con él tenían hambre, y el sacerdote dio el pan de Dios, que no debía ser comido por ellos, pero en esa situación específica Dios lo permitió. Saúl, sin embargo, mató al sacerdote, y David tuvo que refugiarse en la cueva de Adulam. Los que estaban allí con David formaron un ejército para luchar por el reino de Dios, que comenzó con aquellos que estaban en aprietos, endeudados y amargados en espíritu. El mejor ejército estaba con Saúl y el peor estaba con David. ¡Dios llamó a las cosas locas para ser parte del ejército de los obreros de la última hora! 

Levítico 13; Números 12

26. ¿Quién allanó el camino para la curación de Naamán? Una niña, que en hebreo significa pequeña, insignificante y sin ninguna importancia. Dios hoy está llamando personas así, esa niña era una esclava y trabajaba en la casa del comandante. Ella fue la única que dijo: “Hay un profeta en Israel”, que podría curar la lepra del comandante. La lepra significa el pecado de rebelión, que generalmente comienza con la insatisfacción en el corazón, con algo o con alguien. Si usted no trata una gripe y se cura por completo, esta gripe puede convertirse en neumonía. Cúrese si usted tiene alguna insatisfacción. Si usted tiene algún problema en el corazón, busque limpiarse. Si no se limpia, mañana usted tendrá lepra, al igual que María en Números 12. Cuidado, la lepra necesita ser removida de la congregación.

Efesios 1:17

27. El secreto de la bendición es ser sencillo, seguir la palabra que ciertamente nos llevará a Cristo, porque en Él están todos los tesoros de la sabiduría y el No busques sabiduría y conocimiento fuera de Cristo, no piense que usted es lo suficientemente bueno para juzgar el camino de la iglesia y la palabra profética. En el fluir del río de la gracia, revelado en Efesios, Dios derramó abundantemente Su gracia en toda sabiduría y prudencia. La fe en la palabra y la obediencia es lo que nos ha proporcionado dar testimonio en los últimos años de tanta sabiduría de Dios en la conducción de la iglesia. Lo que Dios está haciendo entre nosotros es maravilloso; hombres difíciles, obstinados, tercos, difíciles de tratar, invadiendo las calles, predicando el evangelio del reino, ¿quiénes somos nosotros para hacer esto? ¡Es Cristo! La sabiduría de Dios. Todo esto está en la palabra profética que está ejecutando la palabra de Dios.

Romanos 14:7-9

28. Nadie lo engañe con razonamientos falaces o argumentos falsos. La influencia del embrión del gnosticismo, incluida la filosofía griega, ya estaba penetrando en la iglesia con sus argumentos persuasivos, teniendo la apariencia de sabiduría. No vaya tras eso. Aunque físicamente ausente, Pablo estaba con ellos en espíritu regocijándose y verificando el buen orden y la firmeza de su fe en Cristo. Con Cristo como cabeza, todo entra en orden. Así como recibieron a Cristo, ahora debían caminar en él. Andar es el proceder en el día a día, nuestra conducta y comportamiento.

Efesios 2:21-22; Mateo 16:18

29. De esta manera, debemos estar arraigados y edificados en Él. Nuestro edificio está arraigado y cimentado en el amor. No somos una organización religiosa, somos la labranza de Dios, como una planta echamos raíces en Cristo para extraer todas las riquezas de Cristo para que sean nuestra realidad. Somos un edificio bien ajustado y compactado, tejiendo este tejido de amor estamos siendo edificados para la morada de Dios en el espíritu. La parte de la edificación del cuerpo de Cristo, Dios se lo entregó a la iglesia para terminar. ¡Vamos a terminar este tejido de amor!